En la nueva fábrica estadounidense de VW, la nueva luz de TRILUX ayuda en la gestión de la energía¬. Prof. Dr. Martin Winterkorn, director ejecutivo de Volkswagen, es famoso por su meticulosidad y su perfeccionismo. Por eso, se dedica con especial interés al nuevo comienzo del segundo grupo automovilístico más grande del mundo en los Estados Unidos.

El alabado tren de vapor "Chattanooga Choo Choo" que circulaba entre Nueva York y Chattanooga y que dio a conocer por lo menos el nombre del lugar en todo el mundo, ya es historia desde hace mucho tiempo. Luego empezó una nueva era en la industria del automóvil: por eso, con la apertura de la fábrica de Volkswagen en Chattanooga en Tennessee, el 24 de mayo del 2011 fue el día de la alegría y del orgullo en la historia de Volkswagen. En el área de casi seis kilómetros cuadrados, en solamente dos años se ha creado una fábrica completa de automóviles. Aquí, sale de las líneas de fabricación el Passat estadounidense, el primer vehículo de su segmento equipado con la tecnología clean-diésel que ahorra combustible.

Aquí, más de 2.500 empleados fabrican hasta 150.000 vehículos al año. Volkswagen invirtió aprox. mil millones de dólares estadounidenses en el desarrollo del emplazamiento de Chattanooga. La nueva instalación cumple con los mayores requisitos de la norma estadounidense LEED (Leadership in Energy and Enviromental Design). Esta norma define altas exigencias para la construcción sostenible y compatible con el medio ambiente, así como para el equipamiento de los edificios. La fábrica, por ejemplo, es el primer emplazamiento de Volkswagen con una iluminación exterior LED completa. En las naves de producción y las oficinas solamente se utilizan lámparas que ahorran energía.

Y eso se rentabiliza: Mientras tanto, la fábrica de Volkswagen ha recibido la certificación LEED platinum. La marca de calidad LEED es asignada en cuatro niveles de calidad por el Green Building Council (USGBC) estadounidense. Y hasta ahora, el emplazamiento de producción en Chattanooga es la primera fábrica de automóviles con una certificación platinum. "Volkswagen fomenta en todo el mundo una movilidad sostenible y procedimientos de producción compatibles con el medio ambiente. Estamos muy orgullosos de que nuestra fábrica en Chattanooga haya recibido la certificación LEED platinum. Confirma que estamos en el camino adecuado", explica Hubert Waltl, miembro de la junta de la marca Volkswagen Pkw para el campo de actividades de producción y logística. "Ahora, Chattanooga es un criterio de referencia para las fábricas de Volkswagen en todo el mundo“, añade Waltl.

Retos de iluminación

No obstante, primero se tenían que acomodar a las normas y medidas estadounidenses, que difieren mucho de los estándares europeos. En efecto, las cajas de enchufe estadounidenses llevan una tensión de 110 voltios, justamente la mitad del valor alemán. Pero, la iluminación en los edificios industriales estadounidenses, en muchos casos, dispone de otro circuito eléctrico, en este caso con una tensión de 277 voltios.

Y, además, los norteamericanos miden las distancias en pies (ft) y, por consiguiente, una luminaria fluorescente estadounidense con una longitud de cuatro pies solamente corresponde aproximadamente a un tubo fluorescente alemán con una longitud de 1,20 metros. Tampoco, los instaladores estadounidenses conocen los carriles que se utilizan en Europa para fijar las luminarias. "Los electricistas estadounidenses colocan sus cables en tubos de acero galvanizado que se instalan de forma continua en el techo pero, entonces, solamente dejan espacio para la conexión de luminarias individuales", informa el ingeniero Matthias Strutz del departamento de planificación de Volkswagen en Wolfsburg sobre las primeras experiencias en Chattanooga. Después de declarar Strutz el sistema de carriles

de soporte obligatorio también para la nueva fábrica de Volkswagen en los Estados Unidos, los instaladores comenzaron su trabajo. Hasta la inauguración de la fábrica, los instaladores estadounidenses colocan en las naves de Volkswagen de Chattanooga el sistema de luminarias E-Line de TRILUX con una longitud total de 34 kilómetros. Y tienen que añadirse varios miles de luminarias para las oficinas y los pasillos. "De esta forma, TRILUX ha suministrado aprox. el 90 por ciento de la iluminación interior de Chattanooga“, informa el Key Account Manager del fabricante de luminarias en Arnsberg, Anton Wanninger. Finalmente, los responsables de Volkswagen han sido convencidos por la eficiencia energética de los productos de TRILUX.

"A través de las luminarias de TRILUX hemos podido reducir el consumo eléctrico para la iluminación del taller de aprox. seis vatios a cuatro vatios por metro cuadrado", confirma el planificador de Volkswagen, Strutz. Para la fábrica de Volkswagen de Chattanooga esto significó un ahorro de aprox. un tercio de los gastos energéticos habitualmente calculados para la iluminación. Motivo suficiente para el grupo Volkswagen con su expansión mundial, por ejemplo, en China, Brasil o Malasia de colaborar de nuevo con TRILUX.